Sin duda que las reformas judiciales que se realizan en la constitución, es una herencia del lópezobradorismo, como tutelar de la mayoría calificada en favor de MORENA y aliados, y es el último cumplir de un mandato en donde el expresidente Andrés Manuel López Obrador advertía mandar al diablo a las instituciones creadas para la perversión de las funciones del Estado, como es el caso de los Jueces que intercambiaron ser unos burócratas ladrones por servidores del pueblo mexicano y además de que dejaron de ser empleados de la población para ser sirvientes empresariales y de la intromisión extranjera, aunque con salarios de lujo. El deterioro del poder judicial ha quedado claro al intentar invadir esferas jurisdiccionales, imponerse sueldos desproporcionados, emitir amparos improcedentes y la detención de labores sin misericordia social en un claro golpe de estado, que ha sido superado por la contundencia del poder ejecutivo bajo el mandato de la Presidente Claudia Sheinbaum y con la mayoría calificada progresista en el Congreso, respecto al poder legislativo, con lo que mandan al diablo a las instituciones que se convirtieron en bodegas operativas del neoliberalismo y del gobierno corrupto llegado al poder por medio del pripanismo.Más en www.somoselespectador.blogspot.com